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¿Por qué son más prácticas las cocinas integrales?

Llamamos cocinas integrales a aquellas que aprovechan al máximo el espacio empotrando los electrodomésticos a las paredes, lo mismo que alacenas, cajones o gabinetes. El fin último de las cocinas integrales es el de crear un espacio lo más eficiente posible, que tenga un lugar de guardado para cada cosa y que por su distribución haga que las tareas que se realizan en este ambiente como cocinar, lavar la vajilla, limpiar, poner la mesa y demás, se hagan de una manera más sencilla y con menos esfuerzo.

Cocinas integrales en módulos

Las cocinas integrales pueden diseñarse en módulos, que serán fabricados en una planta y llevados a la cocina vacía para su ensamblaje. Estas cocinas también pueden llamarse cocinas modulares y se realizan teniendo en cuenta las medidas exactas y la distribución de los electrodomésticos que se empotrarán entre estantes y alacenas.

Cocinas integrales que usan un solo material

Para mantener la uniformidad, las cocinas integrales suelen hacerse de un solo material, manteniendo además una paleta constante. Los materiales más comunes son la madera, la melamina o fórmica y distintos tipos de conglomerado, siempre teniendo en cuenta que sean durables, resistentes a la humedad y fáciles de limpiar. Cada sección de la cocina formará parte de un juego o estará combinada de una forma u otra. Las superficies de trabajo estarán todas revestidas por el mismo tipo de granito, azulejo o el material elegido para su cubrimiento.

Las cocinas integrales aprovechan mejor el espacio

Una de las razones que hacen las cocinas integrales tan eficientes, es el uso inteligente del espacio. Cajones para utensilios o cubertería, estantes cerrados para aquellos objetos que no debieran estar a la vista, alacenas destinadas únicamente a la comida no perecedera, pequeños estantes en las puertas para las especias. Las cocinas modernas han mejorado mucho el funcionamiento de los herrajes también, haciendo que las puertas y cajones sean más duraderos.También otra muy buena alternativa, es emplear estanterías de vidrio templado, donde podamos guardar nuestra vajilla y que le de a nuestra cocina un detalle decorativo único

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Las cocinas integrales con isla

Una isla no es un elemento indispensable en las cocinas integrales, aunque sí bastante común. Siempre que exista el espacio para incorporarla, la isla en las cocinas integrales conlleva posibilidades realmente interesantes en términos de distribución, espacio adicional de guardado o hasta como comedor de diario. Una isla puede tener una mesada para que la gente se siente a comer, una bacha para lavar los platos o incluso hornallas y horno. También puede ser el espacio para mantener electrodomésticos más chicos como la licuadora o la tostadora.

Si el espacio de tu cocina, es más largo que ancho, podés optar por una isla extensa que conserve la estructura del luar. 

Extructura y color

En el caso de las cocinas con estructura cuadrada, o de tamaño pequeño, el blanco juega el papel principal para conseguir ampliar el espacio. Para que la superficie compacta no le transmita al ambiente, un carácter con falta de animo, será ideal cortar el blanco y combinar la personalidad que nos brinda, con electrodomésticos en color plata

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Las cocinas blancas nos darán la posibilidad de incorporar una batería de cocina a todo color. Lo bueno de esta chance, es que no necesitamos emplear demasiada ornamentación, debido a que los utensilios, accesorios y vajilla de cocina en color, nos brindarán por si mismos, el toque de magia necesario.

Otra idea genial que podemos apreciar en este espacio, es el blanco de la mesada rodeado de venecitas en color negro algo que genera volumen y transmite un aspecto muy elegante. Si te gusta esta combinación de colores.

Una muy buena idea, es colocar una barra que además de ser para comer o tomar un trago con amigos, pueda servir para guardar la vajilla y almacenar los alimentos no perecederos.

Además de tener un mobiliario de cocina en color blanco, algo que queda muy bonito, es emplear ventanas oscilo batientes, que nos permitan abrirlas en dos sentidos, según nuestra necesidad.

Si nuestra cocina es blanca, cualquier color que agreguemos quedará fabuloso. Asimismo, el  negro gracias a su carácter intenso, es uno de los matices que mejor logrará destacar el estilo al que se busca llegar.

Las cocinas pequeñas deben verse siempre ordenadas y limpias para que se vean más espaciosas y plenas. Los materiales que escojamos para mesadas o barras necesitan ser resistentes y fáciles de mantener higiénicos.

En espacios pequeños, es regla general , tratar de que toda carga visual se vea reducida. Por eso, la abundancia de cosas, hará que el ambiente  luzca más chico. EL secreto para lograr esta ilusión óptica no es tan complicado. Uno de los trucos  es la instalación de estanterías abiertas. Estas estructuras colaboran a brindarle más amplitud a la cocina. Desde un punto de vista práctico, los estantes te permitirán tener a mano todo lo necesario para elaborar tus platos y al mismo tiempo, la estética que le impondrá a este ambiente será más fresca y divertida porque podrás jugar con texturas y colores que estarán a la vista.

Otra intervención que traerá luz y profundidad a tu cocina pequeña, es la madera clara. Mucho se ha utilizado este material en este ambiente, pero el aporte que necesita la tuya es de sensación de amplitud y dinamismo.

Otra de las ventajas de una cocina moderna es integrar a su espacio la existencia de una isla que generalmente se sitúa en el centro del ambiente. Es posible utilizarla como lugar donde se trabaja con los alimentos-ya sea cortándolos o limpiándolos- pero también  brinda la posibilidad de contar con una mesa donde reunirse para comer o mientras se lleva a cabo el preparado de los platos.

Las cocinas con módulos o gabinetes en tonos oscuros son ideales para que los electrodomésticos de color negro se fundan con el conjunto sin necesidad de cubrirlos con puertas. 

’Para que nuestra cocina luzca bien, no es necesario contar con muchas cosas. En todo caso, inclinarnos por un diseño minimalista o moderno nos ayudará a que con pocos elementos, sobriedad y elegancia consigamos una cocina funcional y cómoda.

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